¿QUIÉN SOY?




Este es el blog de MANUEL BUENDÍA BERCEDO. Pretendo mostrar una propuesta profesional y particular acerca de la Igualdad de Género y las Masculinidades. Veremos algunas respuestas a la pregunta anterior pero sobre todo, haremos muchas más preguntas para invitar o implicar a otros hombres en la Igualdad.



miércoles, 19 de junio de 2013

¡Hay mil maneras de ponernos a parir!

Seguimos con la intención de explicar las cuestiones de género de la manera más fácil posible, avanzando, llegando todo lo lejos que podamos.  Caminar en dirección a la Igualdad significa incomodar  o subvertir, al orden patriarcal establecido. Pretendemos  proponer unas jerarquías diferentes, ni más ni menos. El género es entonces un conjunto de fenómenos construidos en torno al sexo. Dicho de otro modo, hemos elaborado reglas socioculturales sobre el hecho físico del sexo, sobre el hecho de haber nacido hombres o mujeres. Dicho de otro modo, que por no insistir no sea, de los caracteres sexuales primarios, secundarios, hormonales, diferente biología  hemos sacado unas conclusiones sociales, culturales, en definitiva, políticas, donde hay privilegios más o menos sutiles o groseros, y estereotipos rígidos. De partida, nacer hombre “vale más”. Queda demostrado, yo creo, que además de diferencias, existen desigualdades.  ¿Tan difícil es de entender esto? Te voy a hablar de hombre a hombre, amigo, abre los ojos, mira al mundo y no digamos nada más de momento. Cada uno vamos a intentar ser feliz dando pequeños pasos hacia adelante. Además, unos pocos nos hemos dado cuenta que aparte de privilegios, hay otros regalos envenenados, o consignas de género a los hombres que son lastres. Y para colmo, algo menos importante, (y para mí lo es mucho), el patriarcado nos expropia  otras muchas experiencias muy gratificantes que nos las perdemos. Tampoco nos vamos a hacer la víctima. Respecto a eso lo tenemos al alcance de la mano, de la vista, del corazón, del entendimiento.

Pedro, me he enterado que vas a ser padre de Irene, una niña que viene al mundo, ¡enhorabuena! Es muy deseada, lo sé. Faltan horas para el parto. Dale ánimos a Adela de mi parte. Hay un corto excelente de Iciar Bollain, con el actor Luis Tosar que te va a gustar. ¿Cuál es tu papel durante esas horas me preguntabas? Está bien que te lo plantees. Sabes que la empatía es un sentimiento muy humano que hay que aprender y practicar. Te pones en su lugar durante un momento y te asusta lo desconocido, la incertidumbre, porque después de esperar con ilusión y cariño durante cuarenta semanas, sabes que durante unas horas la persona que amas va a sufrir dolor  y te emocionas con ella. Algunos signos y síntomas no son naturales sino propios del entorno y de la organización social. Eres un buen hombre. Piensas que no puedes hacer nada, aunque eso suena a otras veces donde asumes la responsabilidad de todo. ¡Y en esto no puedes, machote!. Si tu caso hubiera sido una adopción, serían otras circunstancias. Y si fueras mujer y es otra mujer la que va a dar a luz, supongo que te resultaría algo más fácil ponerte en su lugar, o igual no. Yo te conozco bien y la empatía la trabajas siempre.
¿La vemos?
NIVEL UNO

Quedaron atrás aquellos años cuando los hombres no podíamos entrar a la sala de partos. No es el momento de relatar experiencias negativas al respecto. Unos pocos y muchas mujeres  hace 20-25 años intentábamos sensibilizar a los hombres a que participaran, se implicaran. Empezaran a reflexionar sobre si lo deseaban ellos y sus parejas. Unos muy pocos se incorporaban poco a poco a  la preparación al parto, aunque no sabíamos muy bien para qué. Está superado hoy. El oficio o profesión de las  matronas ha evolucionado mucho. Tenemos que estar orgullosos de su humana labor actualmente, y a juzgar por el video, hay varios debates abiertos para mejorar. También contamos  ya con algunos matrones hombres. Me consta que  los dos que hay en Cantabria son profesionales muy experimentados y con una alta sensibilidad humana. Enfermeros hay muchos más, en algunas ocasiones picos de 15-20% de hombres. La foto de arriba quiere representar la ternura de los hombres profesionales de la salud y los cuidados . Repito, muchos son muy completos,  tanto a nivel técnico como humano, en todos los niveles. Cada vez habrá más, así como mujeres en puestos más cualificados. Sin otras comparaciones, guerra de sexos o competiciones que son debates estériles. sin embargo el que hay que abrir es el complejo debates de los hombres y los cuidados a personas. ¿Ha quedado claro?
Los techos de cristal se están disolviendo poco a poco respecto a , obstetras, ginecólogas, mujeres responsables de la gestión...
La evolución del Sistema Nacional de Salud y las salas de parto en los hospitales no lo vamos a desarrollar ahora. Ni las alternativas privadas con otros reales o falsos  valores añadidos. La eterna paradoja del progreso, donde a medida que progresa la calidad científica y asistencial, quizá se ha perdido cierta chispa, se ha deshumanizado, no lo podemos omitir. Pueden parecer centros frios, poco acogedores.

Pedro, te cuento muy resumidamente que hay un debate muy actual sobre una posible excesiva medicalización de las mujeres que también es algo que nos importa a nosotros. Podríamos hablar mucho en torno a la lactancia materna. O sobre ese tabú que es la menstruación. Ocurre la paradoja de que muchas mujeres se las incita en exceso a drogarse con analgésicos por los dolores, para el beneficio de las empresas farmacéuticas, y a su vez no investigan, porque es muy caro, sobre la endometriosis, que lo sufren millones de mujeres. Esa palabreja viene a ser que tienen células como las del útero con su correspondiente “regla o sangrado” fuera de sitio, es decir, en otros órganos. Es un fallo embriológico que las haya en el estómago u otro sitio. Eso les hace la vida mucho más difícil. O debatir sobre la excesiva medicalización, o visitas, o controles durante estos meses de embarazo que poco a poco también has ido presenciando. O excesivas revisiones, citologías, mamografías… 
La implantación generalizada de la anestesia epidural que ha pretendido suavizar la condena bíblica del parirás con dolor, quizá haya tenido algunos inconvenientes.  No es arriesgado decir que quizá por la inercia del progreso mal entendido actual ocurre que en los hospitales,
 las mujeres en vez de dar a luz, las parimos, decidiendo todo por ellas, como si no fueran capaces.
En cualquier caso a ti y a mi y a muchos, nos gustaría tener espacios, o grupos de hombres para poder informarnos de estos temas y muchos más, y afrontar los siguientes meses con seguridad, y cierto control de la realidad, para asentar las bases de la crianza, los cuidados, la educación, una auténtica implicación de los hombres. 

NIVEL  DOS
Hay otro video que te va a gustar también posiblemente.  Eres diferente a ella, YA LO HEMOS DICHO. Tienes otro papel diferente en la función, pero te haría ilusión tener el espejismo durante un momento de saber lo que ella siente o nota. Tienes otro papel, pero haces todo lo que sea  para sentirte más implicado. Y te seduce a lo mejor experimentar la parte más guay que la dolorosa. ¿Lo vemos?

 

Aquí  te has dado cuenta de que en torno al nacimiento y la crianza hay mucho negocio. Son muchos puestos de trabajo, es normal. La publicidad es una herramienta muy potente. Y quizá lo que te ha llamado la atención ha sido la parte bonita en vez de fijarnos en lo doloroso. Es atractivo compartir los mismos estímulos, sensaciones, emociones… y te parece que así es más fácil después implicarte. Es posible. Sabes que si empiezas bien, es más fácil que asumas tareas posteriores como propias. O simplemente esa generosidad recíproca de compartirlo todo. Está bien. Pero una pequeña observación puede ser un espejismo. Ese camino tiene sus trampas. Es una igualación ficticia decir: para que ellos disfruten del embarazo. No vaya a ser que los intereses de las personas que resaltan el esencialismo de cualquier tipo, nos entretenga en simulaciones ficticias y contribuya indirectamente a no dar pasos en otras direcciones. Algo así como nuevas formas de perpetuar viejos roles. El poner la maternidad en un pedestal por ejemplo, puede ser una forma tramposa de distracción.Simplemente lo menciono, habrá que estar atentas y atentos. La autonomía, la libertad, el empoderamiento son valores que revisar constantemente. Le damos la vuelta: es precisamente cuando haya paridad, reparto en el poder real y efectivo, mejorarán las políticas hacia los temas importantes para las mujeres, por lo cual los asuntos relacionados con la maternidad cobrarán prestigio social...  Te propongo otro video, el definitivo.

NIVEL  TRES
Vamos a ser muy ambiciosos. Quieres empezar bien desde el principio, correcto. Os habéis repartido las tareas todo lo compensadas que habéis podido, desde que supisteis la noticia. Sois físicamente diferentes, lo tienes asumido. El hecho del parto le ha tocado a ella. Te has preparado al 100% desde tu papel. A ti no te va a doler. Ese debate ahora es estéril. Lo asumes. Todos los cambios físicos, hormonales tampoco lo has vivido, lo asumes. Perdóname que me ría o me produzca cierta ternura saber que en tu preparación inconsciente  has tenido algo así como un embarazo sicológico, con tus nauseas, vómitos, y subida de peso. (…)Por cierto te recuerdo que quizá dentro de cuatro meses tendrás que currártelo para convencerla y volver al gimnasio para resolver ese problema. También te digo, quizá no hayas caído en la cuenta que tendréis que turnaros, no podréis ir a la vez. ¿Sabes por qué verdad?
Te propongo que te prepares, puedes hacer  mucho. Y puedes hacerlo bien. Puedes tener el privilegio de elegir entre hacer eso, a la fuerza malamente o nada. Muchas emociones y sentimientos vas a tener, los tuyos propios que de otra manera te los hubieras perdido. El video tiene muchas lecturas y debates sobre el mismo, pero no es el momento. Tampoco es el tema el parir de manera natural como una forma de “primitivismo”, de volver a los ancestros. Ni asuntos de modas o contagios entre personas modernas, o las parejas con otros diferentes estilos de vida. Supongamos que en vez de su casa fuera una sala bien preparada del hospital.Tampoco el tema ahora es hablar de otras personas como el personal experto, o redes de apoyo, las amigas. Todo eso lo dejo para otro momento. Me importa ahora tu particular reflexión: 

 “en todo esto qué pinto yo

Ahora toca fijarte en el papel del hombre que sale en el video. No me atrevo a decir si es romántico, o de novela. Es bonito y real. Procura saber y sentir lo que piensa el hombre. Procura sentir lo que dice, te lo imaginas, y sobre todo lo que no dice. Cuándo lo dice y cómo lo dice. Cuándo y cómo mira. El cariño que desborda  y los cuidados
Como él, tú no serás el protagonista en tu película, ni falta que hace. Así vamos aprendiendo a no serlo siempre, y a delegar responsabilidades. Eres papel secundario dirán, vale. Yo te digo que no es exacto. Eres papel principal en tu categoría, que puede ser categoría única. Te advierto de la misma manera que serás padre en categoría única. Lo que no hagas a partir de ahora, lo podrán hacer o no otras personas, pero tienes ahora el privilegio de elegir primero y has de saberlo. NO HAY EXCUSAS.

Ahora ya sabes, llámame por teléfono cuando acabe todo, ….. o mejor dicho cuándo empiece todo.
(Inauguramos pestaña nueva: masculinidades y salud.Cuidados y autocuidados.)


miércoles, 12 de junio de 2013

Divertimento con una historia de expertozoides y óluvos



Voy a hablar hoy del cromosoma X y del cromosoma Y, pero en broma. Y procuraré que sea una broma inteligente. Hablaré de espermatozoides y de óvulos, es decir de sexo. Esta palabra produce el milagro de resaltar siempre aquel texto donde aparece. Por eso lo he puesto, para llamar vuestra atención y espero que dibujar una sonrisa. Los buscadores de la red le tienen enchufe si haces eso. Y hablaré sobre todo de lo que más me importa, aprovechándo este simpático dibujo, hablaré de expertozoides y de óluvos, en un divertimento de género.


Todo el mundo tiene, en el núcleo de casi todas sus células, 23 pares de cromosomas, por eso las llamamos células diploides.  El espermatozoide es una célula haploide, porque tiene la mitad de cromosomas, constituye el gameto masculino. Se produce en los testículos. Voy a procurar no ser demasiado pedante recargándolo de adornos, lo haré únicamente cuando lo pida el guión. Podríamos extendernos en el proceso de maduración de los espermatozoides, hecho que finaliza en el epidídimo, pero no lo voy a hacer, vamos a suponer que todos son muy maduros. Curiosamente  son las únicas células en poseer  flagelo. Esto le ayuda a ser una célula con alta movilidad, capaz de nadar libremente e ir a donde le dé la gana. Es el rey del  espacio público. En la fecundación humana, los espermatozoides contribuyen por igual, a la nueva célula diploide, uniéndose los 23 cromosomas del espermatozoide con los 23 cromosomas del óvulo, que es el gameto femenino, también haploide. Los espermatozoides son de dos tipos. Pueden llevar cromosoma sexual X o Y, mientras que el óvulo lleva sólo el cromosoma X, no hay de dos tipos. Se llaman así los cromosomas por la forma que tienen, ya que se parecen a las letras. 
Más de la mitad de la gente, ¡las mujeres no son una minoría!, sino el 50,5% de la población mundial, tienen el par de cromosomas sexuales  iguales. Suman el X de uno y el otro X de la otra, y así tienen XX. Y  casi la mitad de la población mundial, los hombres, tiene sus cromosomas sexuales diferentes. Tienen XY que corresponde al X del óvulo, más en este caso a un espermatozoide que tenía un Y. No nos vamos a perder ahora en especular o jugar con lo que perdemos en ese cacho que nos falta, o en lo que “ganamos por no tenerlo". ¡Ay el trozo perdido!


Que nadie saque ahí más conclusiones de momento. Recapitulo: cualquier célula es diploide, y los gametos, es decir, los expertozoides y los óluvos, tienen la mitad de cromosomas, son por eso haploides. Es un truco muy fácil. Al juntarse, ya son de nuevo un huevo fecundado y completo, ni más ni menos. A partir de ahí, mediante las mitosis aparecen las divisiones celulares. En este caso, la metáfora de la media naranja al juntarse, podría valer, pero solo en este caso, no  como normalmente se utiliza, que resulta una fuente de muchos problemas. Estos gametos haploides, sin personalidad propia por separado, dicho entre comillas, para este divertimento van a cobrar una personalidad. Los expertozoides son de dos tipos, y según cuál sea el que corone la cumbre, llegue a la meta, triunfe, tenga éxito, es el que gana. Ganará uno del bando de las X o bien otro del bando de las Y. Hasta aquí es bastante sencillo. Ponemos el foco en la carrera. 

Pero voy a seguir utilizando palabras para narrar esta bonita historia. Eso quiere decir que también hablo de lenguaje, y de relatos, discursos, de imaginarios. No está de más que los hombres sepamos que se puede hacer o no, un uso sexista del lenguaje. Depende de pensar en ello y elegir lo que se quiera, sabiendo que tanto los grados  como las  intenciones, son múltiples.Vemos que también estamos hablando de metáforas, más o menos poéticas de describir la realidad.Pero por favor que nadie se pierda. Sigamos adelante.

He escuchado recientemente varias veces utilizar la carrera de los espermatozoides hacia el óvulo como metáfora de la competición y el éxito. (Aprovecho para saludar a la entidad que aparece en el dibujo). Casualmente, se lo he oído a hombres en su gran mayoría. Me parece bien, se entiende. Para darnos ánimos, para insinuar que las tareas muy complejas también se resuelven. Los sucesos poco improbables, también ocurren, se dan si lo deseas con fuerza y trabajas duro para ello. Al final la recompensa llega.


¡ Fíjate que éramos un espermatozoide sobre millones y millones y fuimos nosotros!

Cosas más difíciles se han logrado, ¿no es así? La norma, las reglas del juego están ya definidas. Están definidos los jugadores, de dos tipos recordamos, la pista bien definida, la meta bien definida.

El líquido preseminal, o también apodado preeyaculatorio, fluido preseminal o fluido de Cowper, producido en las glándulas de dicho nombre, entra en escena. Ya se sabe que las cosas importantes se nombran mucho, con nombres diferentes, y el ego de los varones en la historia de la ciencia ha actuado con fuerza a la hora de dejar su huella ( ¡Manuel que te pierdes!). Pues decía, que es una substancia viscosa, un líquido que se expele por la uretra antes de la eyaculación, cuando el hombre está sexualmente excitado. Actúa como lubricante, mojando las paredes de la uretra. Facilita la expulsión, pues no son tan autónomos ni tan expertos como se pensaba. Hace de neutralizador de ácidos ante los restos de la orina. ¡Es muy cansado tener que estar constantemente decidiendo una función u otra, y preparar pertinentemente el escenario o tenerlo limpio!

Son como el personal en las carreras, aguadores, y quienes alimentan al paso de los corredores y corredoras.Reparten las calorías necesarias para tanto esfuerzo. Hay que saber que los ambientes ácidos son hostiles para el esperma. Normalmente la vagina es ácida, ¡vaya!,  por tanto en la segunda mitad del trayecto tampoco será fácil. ¡ Excusas y otra oportunidad de echar la culpa a la otra parte del recorrido!


Se dice que gana el más rápido, quien lo tiene claro, quien no pierde el tiempo, quien va al grano. No basta tener ambición para obtener éxito, también hace falta un poco de suerte de la que es limpia o buena suerte, o un poco de trampas, de la suerte sucia. Pues bien, supongo que los hombres que se expresan con este símil, tienen claro que se identifican con la parte Y de sí mismos. Tal vez no lo sepan. Podíamos decir que es androcéntrico tanto el sistema como los jugadores. Me parece bien, es simple divertimento. La lectura aún es fácil de seguir, ¿verdad?


Habría quedado ahí la cosa si no hubiera igualmente escuchado ese símil a dos mujeres. ¡Qué interesante! Además les pega, parece lógico, conociendo parte de sus biografías. Es fácil  entender que se identifican con una parte X de sí mismas, no podría ser de otro modo, pero en concreto la más activa, la que hace la carrera. Mujeres que fueron expertozoides X.  La que se pelea con sus compañeros tipo Y. Tal vez no cuestionan el sistema, ni las reglas, o el terreno de juego. Se ven con posibilidades, de hecho, el estar ahí es una demostración de que triunfaron, de que ganaron también entre millones. Me parece bien, es un divertimento igualmente. Son dos mujeres estupendas, dicho sea de paso. Quizá, más que sentirse iguales en la diferencia con sus compañeros varones, tal vez están igualadas, muy parecidas a ellos, pero yo no soy nadie para criticar ni dar consejos. Han ganado la batalla de la vida igual que en su época haploide.


Para quienes me habéis seguido  hasta aquí, a ver qué os parece lo siguiente que planteo.  Os propongo cambiar la metáfora. Me apetece identificarme con la parte X del óvulo de mi madre, que también es mío, que también soy yo.


Imaginad que soy ese óluvo, con su cromosoma X. Llevo muchos meses, uno detrás del otro, incluso años, esperando el momento estoicamente en el ovario. ¡Ahora es el momento! Otras células compañeras demostraron antes aquello de lo que fueron capaces, cumpliendo otra regla, la mayoría sin éxito. Ellas habían tenido más suerte, o estaban mejor colocadas, o lo hicieron bien, por eso actuaron primero. ¡Qué sé yo! En mi caso hubo que esperar. Esta vez me toca a mí. Una compañera de celda de ovario le había regalado a otra, un bello poema de Mario Benedetti, animándola a resistir. Has desarrollado en la espera muchos valores entre ellos la paciencia, y el apunte literario llena de cultura y de belleza la espera. 
Eso sí, es consciente todo óluvo de que tiene una sola oportunidad, se la juega. Es una oportunidad única. El concepto éxito, o las prisas, o la competición es completamente diferente en este caso.  Pero sin embargo también tiene que ser autónoma, y necesita comer.
Es posible que la noticia de prepararse le haya alterado emocionalmente. Hay mucho miedo, una razonable alegría y angustia a la vez.  Otros muchos óluvos con su correspondiente cromosoma X se quedan para otros meses futuros. Además, no hay oportunidades eternas, por lo que muchas se quedarán sin actuar nunca. Es complejo, también algunas simplemente no quieren, o eso parece. 
Es posible que en la espera, desarrollan quizá un sentimiento espiritual, de “óvulo escogido”, eso le sirve, o le da ánimos. Motivo para sentirse una privilegiada.


En el ovario, desde siempre, se rumorea que no es el expertozoide más rápido el que siempre gana. Se dice que depende de lo que tú hagas. Hay muchas cosas que no te cuadran sin embargo, porque con cierta frecuencia gana en efecto el que primero llega. O aunque no llegue primero el ganador viene con enchufe, con privilegios. Eso sin contar que son algunos óluvos quienes parece que eligen a ese más rápido o al que hace trampas.


El caso es en  realidad, que sin saber si es cierto, ni por qué lo crees, piensas que si eres un óluvo empoderado eliges quién entra y quién no. La biología no es matemática. Actualmente ni las propias matemáticas son lo que eran, o lo que otros dicen que son. 


Ahora es el momento, te repites una y otra vez como un mantra. Has echado el ojo a un expertozoide que viene a lo lejos. En el espermatozoide hay una zona, en la cabeza, llamado acrosoma que actua a modo de casco químico. Tiene una capa formada por unas proteínas ( las enzimas hialuronidasa y la acrosina, estos adornos son para darle un rigor centífico). Las enzimas favorecen la rotura, la debilidad de las paredes del óvulo, concretamente la zona pelúcida que rodea al ovocito. O al menos eso dicen. Así se abre un canal al interior del óvulo. En mi particular cuento depende.

A lo lejos, el que va rezagado, charlando por doquier, sonriendo, ¡aquel!, es el que te gusta. Quizá eres tú quien vas modificando el sistema sodio-potasio de la membrana pelúcida para modificar la permeabilidad en la zona concreta que a ti te interesa. Esa es la llave aunque tampoco estás segura. Intentas llamar su atención, ayudarle a distancia, todo es más difícil de lo que parece. Es emocionante, trabajo en equipo, una tarea equitativa, importa el fin y los medios, los propósitos, el momento… 


Y todavía tienes que escuchar reclamaciones de otros expertozoides que protestan. Dicen que no es justo, que ellos han sido más rápidos. Son rápidamente tontos y no entienden nada. ¡Ay, ay, expertozoides tenían que ser, dicen otros óvulos un poco “ovulistas”. Yo tampoco les culpo, puesto que eso es lo que han aprendido en el ovario desde siempre.
No está tan claro. Saben de sobra que es una mezcla entre privilegios, trampas, un poco de suerte, y correr, correr, correr, ser el más rápido. Por otra parte, también el talento, los méritos, si eres más listo o lista, si has tenido más cuidado o te lo has currado. Todos son elementos que influyen. ¡Quién sabe, como a cada cual le apetezca! Hasta los asuntos de sexo están por construir. Hoy la historia me apetece contarla así.Esta alegoría inventada que cambia o puede cambiar la visión de las cosas es un simple divertimento, una de óluvos y expertozoides. ¿Por qué no?

miércoles, 5 de junio de 2013

¡Pero qué coño pasa! ¿Es que hoy no viene nadie?




Aquella mañana se respiraba algo en el ambiente. En el departamento de marketing tenían muchas reuniones últimamente, demasiadas según algunos. En los últimos meses habían tenido que digerir un ERE del 30% de la plantilla, y acoger parte de los compañeros de la filial. Dicha filial había cerrado para siempre después de quince años de expansión. Por tanto, últimamente se habían incorporado más mujeres, concretamente seis mujeres y un hombre. El clima laboral estaba muy deteriorado.Era tenso y sobre todo parecía más bien una guerra de sexos. Para Benito, lo que había que hacer era no hablar tanto y trabajar más.

Era viernes, y estaban esperando a que viniera Luis, el director. La plantilla definitiva quedaba con las incorporaciones en 15 personas, ocho hombres contando con Luis y siete mujeres, las seis nuevas y Elvira, la secretaria. Dicen que estaba allí mucho antes de que se construyera el edificio. Era imprescindible contar con ella para todo. Como su nombre indica, guardaba muy bien todos los secretos, como una fiel secretaria, y por qué no decirlo, como toda una madre.
¡Benito tuvo que hacer la pregunta!:
-  ¡Qué coño pasa!, ¿ Es que hoy no va a venir nadie?
Vanessa, como un resorte, a quien ya desde el segundo día le apodaron la feminista, respondió:

-¡Cómo que nadie, estamos todas! ¡Sólo faltan los hombres!

-¡Bueno, ya sabéis a lo que me refiero!,- respondió Benito con pinta de discutir como siempre desde primera hora de la mañana.
-Pues eso, sabemos muy bien a lo que te refieres- espetó Carmen apoyando a su amiga.
- ¡Sacáis las cosas de quicio! Antes entre tíos ventilábamos los asuntos más rápido, y  cuando las reuniones eran por la tarde, muchas veces lo terminábamos en el bar con unas cañas, pero ahora está visto que no se puede. 
Varias de ellas tienen obligaciones familiares por la tarde y no pueden participar. Vanessa, aunque está soltera, intenta decirles que eso no se puede consentir.

Aprovechando la subvención, la empresa había elaborado un Plan de Igualdad, el año anterior, cuando todo parecía que iba bien. No se había conseguido demasiado pero al menos, sirvió para incorporar nuevos debates, decían unas, y para caldear el ambiente según Benito.
En ese momento de la conversación, ya había dado tiempo a que se incorporaran dos nuevos compañeros.
-¡Por fin llegan refuerzos!-respondió Benito, dispuesto a ponerlo aún peor.
Enrique, con aire aparentemente conciliador, añadió que el malestar venía porque desde que han venido ellas, acaparan todas las cosas.

-¿Por qué decís eso? ¡Poned un ejemplo!- dijo Elena, la informática.
-Pues, la selección  del concurso de ascensos, por ejemplo- respondió Carlos.
Elena también  alterada, ya no pudo más y les dijo- ¿Pero cómo podéis decir eso? ¡Si somos un 56% de mujeres en dicha selección y un 44% de hombres, no hay tanta diferencia! ¿A eso le llamas acaparar? ¿No os dais cuenta que una cifra parecida a esa tendría que ser lo normal en cada puesto, cada departamento, cada empresa? 

Los demás iban llegando. En realidad tampoco era del todo cierto que faltaran los hombres. Félix y Manolo también estaban desde el principio, pero al parecer, ni fueron tenidos en cuenta por ellas. Félix es un hombre muy tímido, únicamente observa, y no se mete en líos. Y Manolo, según Benito es mejor que no esté, puesto que siempre está de parte de ellas. ¡Para colmo se había cogido el permiso de paternidad!. Fue la burla durante un tiempo por ese motivo.
Lo de Jorge es todavía peor, si lo miramos friamente. Estaba en su despacho aprovechando el tiempo, y terminando unos informes. Era la mano derecha de Luis, le había entretenido por el móvil un rato antes y ya sabía que iba a llegar tarde. ¡Hay que saber gestionar la información!, se le suele oir decir.

Vanessa, que había estado callada todo el rato desde la famosa pregunta, igual que Gladys y las demás, zanjó la cuestión con la frase en colectivo y con mayúsculas:

- ¡LO QUE PASA ES QUE SOIS TODOS UNOS MACHISTAS, Y MUCHO MÁS QUE ME CALLO!
En realidad, fue Luis quien zanjó la cuestión llegando en ese momento y poniendo orden.

-¡Esto parece un colegio, se os oye desde el ascensor! No hay más tiempo que perder. El tiempo es oro. ¡Hay que ponerse las pilas y aumentar las ventas como sea, si queremos sacar esto adelante!...

(Inauguramos sección de masculinidades y empleo )