¿QUIÉN SOY?




Este es el blog de MANUEL BUENDÍA BERCEDO. Pretendo mostrar una propuesta profesional y particular acerca de la Igualdad de Género y las Masculinidades. Veremos algunas respuestas a la pregunta anterior pero sobre todo, haremos muchas más preguntas para invitar o implicar a otros hombres en la Igualdad.



viernes, 30 de septiembre de 2016

Mujeres en el IBEX y los anabolizantes

41.Los cambios son muy lentos, pero esto es lo que hay. Aunque visto de otra manera, ¿a quién le importa el IBEX?
Los cambios siempre parecen muy lentos cuando lo hacen en el sentido que uno desea, en este caso a favor de la Igualdad. Y es normal que sepan a poco ya que nos gustaría una situación ideal. Las mujeres ocupan solo el 19% de los puestos en los consejos directivos de las empresas del Ibex. La mayoría no son puestos clave.

La ley de Igualdad (ley orgánica de 2007 para la Igualdad efectiva y real de mujeres y hombres) nos ha parecido en multitud de ocasiones papel mojado, un cuento muy bonito de buenas intenciones. Tenemos mucha suerte de contar con ella, y es mucho mejor que su contrario (no tenerla).

Simbólicamente, nos tenemos que recordar cada cierto tiempo hacia dónde nos dirigimos, o hacia dónde hemos dicho colectivamente que queremos llegar. Eso es la utopía. El problema es que al no haber compromisos firmes, y quizá sanciones, se quedan muchas veces en las “buenas intenciones”. En marzo del 2015 cumplió el plazo de ocho años que propuso el legislativo y fue el plazo que nos dimos la ciudadanía para que los órganos de gobierno de las 35 empresas españolas con mayor capitalización  fueran representadas por al menos un 40% de mujeres. Hace muy pocos años no había casi ninguna, y hay cinco empresas que se acercan bastante a la paridad. Otras muchas siguen con una o ninguna mujer.

¿Pero esto a quién le importa? ¿Qué repercusiones tiene? ¿Beneficia en general al trabajo por la Igualdad o es un simple maquillaje? ¿Es simplemente un indicador medible de la situación?  ¿La tendencia es suficiente, va a buen ritmo, o camina menos rápidamente que en otros asuntos? ¿A quién le importa el Ibex? ¿Que haya mujeres en los consejos de administración facilita que las "buenas prácticas" en la empresa privada acerca de temas de género avancen?  Todo esto merece un estudio y una explicación mucho más profunda… 



42 ¡Así tendré  un cuerpo envidiable!


Cuando Sergio recibió el paquete de correos se alegró como si fuera un niño chico pero se sintió poderoso como lo que entiende que es un hombre. Había comprado en una web de internet, un lote de productos esteroides anabolizantes fabricados clandestinamente en laboratorios caseros de Turquía. Son sustancias sintéticas que sirven para potenciar el volumen de sus músculos y así tener un mayor rendimiento atlético.

Sergio pensaba que así sería mucho más competitivo en el gimnasio, y taparía la boca de los cuatro colegas más capullos del gimnasio.

A partir de ahora le tendrán mucha envidia, y por qué no, se aprovechará de un mayor éxito con las chicas cuando enseñe sus brazos, los viernes en la discoteca. Todo son ventajas. Es  ilegal comprarlos en España sin receta médica en estos momentos pero le han dicho unos amigos que en USA o Grecia los consume casi todo el mundo de una manera legal y no hay ningún problema. Aquí siempre vamos con retraso según su opinión.


Económicamente es mucho más barato puesto que por su lote ha pagado 600 euros y podía haber tenido que desembolsar más de 2500 euros en otros circuitos.

Hay un problema. Discutió con su novia porque ella  le decía que eran muy peligrosos para la salud, pero Sergio está cegado por el fin que pretende. Piensa que ella no sabe lo que dice, como otras muchas veces, no tiene mucha lógica, está equivocada. Está convencido de que nada puede pasarle por "tener más testosterona". Es el tipo de hombre que se siente acorralado actualmente en su masculinidad. Quemaría la grasa, tendría más músculo y como mucho se le caería un poco de pelo cuando fuera mayor. Claramente es una inversión, y seguramente en seis meses va a conseguir modelar su cuerpo lo mismo que el trabajo de tres años machacándose en el gimnasio. Le gusta mucho el ejercicio y disfruta con el éxito que le proporciona tener un cuerpo tan envidiable ¿Qué hay de malo en todo ello?


Su novia reconoce que tiene miedo y también cree que no es necesario tener más músculos que nadie. Ella se ha dado cuenta que busca otras cosas, esta situación ya no le compensa.

 -¡Que la den…! Ella está equivocada- decía Sergio para sus adentros-  No tiene derecho a que se meta en mi vida. A partir de ahora podré tener todas las tías que quiera. Ahora por fin me van a tener mucha envidia.

lunes, 19 de septiembre de 2016

39. Tertulia de hombres
Voy a confesaros una cosa. A veces me gusta escuchar conversaciones ajenas que no me incumben. Lo reconozco, por lo que podéis decir con toda tranquilidad que soy un hombre muy cotilla. Yo para disimular digo que hago trabajo de campo, tengo curiosidad, una vocación etnográfica, interés científico o simplemente que me fascinan las historias de la gente. El caso es que esta vez lo tomé como un bonito regalo que me hicieron otros hombres al hablar lo suficientemente alto como para que yo lo percibiera. Me encontraba en una cafetería tranquilamente y en la mesa de al lado estaban cuatro hombres jubilados en plena tertulia. La edad media  seguramente era superior a los 70 años.
Uno de ellos había visto en la televisión española el día anterior un documental  sobre Clara Campoamor y Victoria Kent y se lo estaba contando con cierto entusiasmo a sus compañeros. Ignoro si los temas habituales de otros días son deportes y política, o fundamentalmente fútbol, yo eso no lo sé y me niego a darlo por hecho. El caso es que ese día y esa vez no fue así. Me encontraba yo con la antena puesta y la sensibilidad para valorar esa conversación. Quién sabe si precisamente estos hombres hablan con cierta frecuencia de lo mal que les salió la paella el día anterior, o de lo duro que resulta el cuidado de un enfermo con demencia.
Consultó a sus compañeros y nadie más lo había visto. Les contó con pelos y señales la importancia política y social de esas dos mujeres. Reconoció con entusiasmo que había aprendido mucho, que le habían interesado algunos rasgos de la historia del feminismo. Lo enlazó con naturalidad con la poca visibilidad de las mujeres en la esfera pública, o la importancia del voto, y la influencia de la  sociedad machista,  así como todo lo que faltaba aún por avanzar. Yo iba asintiendo con gusto. Os prometo que ni exagero ni miento.

Al menos la teoría algunos ya nos la sabemos. Sus compañeros le hacían preguntas muy interesados e intercalaban comentarios. Incluso llegó a decir que actualmente las mujeres han accedido a numerosos puestos y falta que los hombres nos incorporemos totalmente en la  casa ¡Lo relacionó así! ¡Conectó la Clara Campoamor de la década de 1930 con lo mucho que disfrutaba él con una nieta y un nieto que tiene que cuidar  todos los días y dar de comer. Al parecer, le hacía ilusión recalcar que es él quien los lleva al colegio por las tardes, y los vuelve a recoger entre otras muchas tareas.
Quizá me conformo con poco pero esto fue una pequeña muestra de mi improvisado trabajo de campo, apuntando en mi cuaderno de notas en un día cualquiera.


40. Mi niño no me come bien
Antonio es padre soltero. No le gusta hablar de qué fue lo que ocurrió con su pareja y por eso sus amigos y amigas procuran no sacarle el tema. Se ha tenido que pedir unos días libres en el trabajo porque su pequeño de dos años y medio está hospitalizado y ha tenido una recaída. Ha tenido dificultades de la alimentación casi desde que era recién nacido. La patología orgánica que arrastra desde los seis meses, hace que ahora le tengan que volver a alimentar con sonda nasogástrica. Tiene muy buena relación con la pediatra del servicio de Gastroenterología y nutrición de su centro ambulatorio desde siempre, gracias al seguimiento. Le ha instruido y ayudado para lograr una vida más o menos normal y tener controlada la enfermedad de base.
No es fácil pero han aprendido mucho y les ha servido a los dos Antonios para fortalecer el vínculo emocional o afectivo. Antonio ha aprendido a mantener la calma y a no ponerse nervioso cuando su hijo Toni se niega  a comer cualquier cosa que no le gusta o le parece demasiado difícil de tragar. Es consciente que no puede acostumbrarle a dárselo todo triturado como hubiera sido lo más fácil en un principio.
El momento más difícil lo tuvo a los siete meses cuando tuvo que pelear con los sólidos.  Su pediatra le convenció de sustituir ese verbo bélico por otro como trabajar, aprender a digerir o disfrutar con los sólidos. Hay que acostumbrarse a no verlo como una guerra. Es algo inconsciente. Darse cuenta de ello y mejorarlo poco a poco como un proceso significa que van madurando y creciendo juntos. Estuvo meses atragantándose con cierta frecuencia. Lo llamaban “sustos”. Aprendieron a espantar los sustos jugando y sobre todo mucha paciencia.
Eso sí, tiene un secreto con su hijo a escondidas de su pediatra. No se lo han dicho y no saben qué pensaría ella. Con más de tres años Toni sigue tomando un biberón por las noches. Ahora están pasando una recaída o un SUSTO con mayúsculas en el hospital, pero esperan que lo superarán porque hacen un buen equipo.