¿QUIÉN SOY?




Este es el blog de MANUEL BUENDÍA BERCEDO. Pretendo mostrar una propuesta profesional y particular acerca de la Igualdad de Género y las Masculinidades. Veremos algunas respuestas a la pregunta anterior pero sobre todo, haremos muchas más preguntas para invitar o implicar a otros hombres en la Igualdad.



sábado, 14 de marzo de 2015

¡Choca esas cinco, Fran! ¿Cómo defiendes la Igualdad?

Conversación de Fran con Manuel:

(Fran es un hombre "especial", miembro de un grupo de hombres y el mejor quiosquero del mundo) Ver la otra entrada: Fran nos explica qué es un hombre de éxito
-¿Manuel, por favor me explicas cómo se defiende esto de la Igualdad otra vez que se me ha olvidado?, reconoció Fran con la inocencia de su autenticidad.
El otro día dije que "creo en la Igualdad" y se metieron conmigo en plan de burla, me dijeron que eran tonterías eso de los estereotipos y que ya está conseguido lo que hay que conseguir. Me enredaron en esas "cortinas de humo" de las que hablas.
-No te preocupes Fran, es muy fácil, le dije. Lo primero para reflexionar y debatir de manera que sirva, hay que hacerlo en calma, sin la presión de las resistencias conscientes, o de las inconscientes, es decir, sin los nervios de poner pegas adrede o resistencias que ponemos sin darnos cuenta.
Extiende la mano. Tienes cinco dedos, ¿verdad?. Te voy a decir cinco ideas y las asociamos a los dedos para acordarnos.
-¿Es fácil encontrar hombres que juegan al fútbol?- Fran dijo que sí.
-¿Es fácil encontrar mujeres que cosen o saben coser?- ¡Claro que sí!, respondió Fran.
Quienes responden que no, o se resisten a responder rápido a preguntas tan fáciles es porque tienen muchas resistencias en su lenguaje interior y se están adelantando a lo que creen que les vas a decir o pedir después, están en guardia por la razón que sea.
1-(Primer dedo) MIRAR-DIAGNÓSTICO: Para eso desagregamos por sexo y contamos. Lo hacemos para saber lo que ocurre. Se llama diagnóstico de la realidad.

-Vamos a imaginarnos un juego- empiezo a explicar- te pones en una esquina y les haces una pregunta a las personas que pasan...

¿Has ido al campo a ver un partido de fútbol este mes? O bien...
¿Has cosido algo este mes? Y yo te doy un euro por cada acierto que tengas, ¿qué harías?
A cada persona sólo le puedes preguntar una cosa ¿Qué harías?
-No lo sé- respondió Fran con cara de extrañeza.
-El objetivo del juego consiste en ganar más euros posibles. Como hay cincuenta mujeres y cincuenta hombres, a los hombres se me ocurre preguntarles lo del fútbol, y a las mujeres lo de coser. Eso es lo más fácil. A mí me gustaría que fuera de otra manera pero tengo la obligación de saber lo que ocurre. Así optimizo el juego ¿Lo entiendes?, le pregunto.

-La verdad es que no,  responde él ¡También conozco a mujeres que van al fútbol, y yo un día me cosí un botón!
- Ya ¡Eso es verdad! Pero está la ley de las probabilidades. Hay un 18% de mujeres en los campos de media en estos momentos. Y hay muchos hombres que saben coser, pero los que "lo han hecho este mes" son muy pocos. Sería mucha suerte que uno de ellos fuera de los que pasan delante de nosotros en la calle, ¿no te parece?

Imagina una bolsa con cien bolas, 82 blancas y 18 negras. Si te pides un color y aciertas, te invito a un helado, ¿Cuál eligirías?
-¡Blancas!, dijo el listillo de Fran.
-¿Ahora lo entiendes?
-¡Sí!
Ahora hacemos un ejercicio de comparación para entender el diagnóstico.
-¿Quién es más alto, los hombres o las mujeres? Dicho en general.
-¡Los hombres!- dijo Fran algo más animado.
-Esta es fácil. Hay muchas mujeres más altas que muchos hombres. Yo conozco algunas, pero no se trata de eso, sino de entender la situación. Para quien no muestra resistencias es fácil acertar en este tipo de preguntas. La altura es algo natural y fácil de medir. Quien no muestra resistencias se fija facilmente.

En todas las demás cosas puede ser más complicado, porque no tenemos costumbre de mirar o contar. Puede ser dificil también el entender la utilidad de hacerlo y puede haber intereses ocultos.

Por eso, en este caso determinamos una media estadística entre todos los hombres y una media entre todas las mujeres. La cifra que sale es mayor en los hombres. Otras veces se intenta mostrar los datos estadísticos de una determinada manera para engañar y manipular.

Ni los hombres, ni las mujeres son grupos homogéneos. Además de la media, harían falta otros elementos estadísticos como la distribución para hacernos ideas más aproximadas del diagnóstico.
Además estas comparaciones les interesa mucho hacerlas a las personas que buscan las guerras de los sexos en vez de quienes buscamos la Igualdad. Por eso hay que tener mucho cuidado.
Por un lado NIEGAN LAS DESIGUALDADES, y cuando las tienen que reconocer, dicen que es algo natural para que nos desanimemos y dejemos  de trabajar en cambiarlo. 

La igualdad se aprende. Lo bueno de medirlo todo es que nos damos en seguida cuenta de lo que aprendemos y cambiamos (o no) en esa dirección

Ya he adelantado el segundo dedo:
2)El segundo dedo es la NATURALEZA-ESENCIA por un lado y CULTURA o APRENDIZAJE por otro.
La Etiología o la causa de las desigualdades es el machismo y el patriarcado que se apoyan en una diversidad biológica para explicar las desigualdades entre mujeres y hombres como algo natural. Quienes insisten en que es algo natural o esencial es para convencernos de que es inmutable. Sin embargo es algo aprendido y cultural, se educa y se aprende por eso podemos decir que  "tiene cura".


-¿Crees que las mujeres son capaces de jugar al fútbol?-le digo.
-¡Claro que Sí!, dijo Fran.

-¿Crees que los hombres son capaces de coser?
-¡Sí!
-¿Crees que los perros pueden volar?
-¡No!
-¿Por qué?
-Porque no tienen alas, dijo Fran. Para volar hace falta tener alas. No está en su Naturaleza.
-¡Exacto! En los cromosomas, en los genes del perro no está el poder volar. O mejor dicho, en los cromosomas, o naturaleza de una paloma, sí está volar.
-¡Como la de la Paz!, dijo Fran riéndose.

-¿Crees que los hombres pueden llorar, emocionarse, mostrarse frágiles?
-¡SI!
-¿Crees que las mujeres pueden escupir, tirarse eruptos cuando están en grupo, o retar, incluso pegarse y usar la violencia?
-Sí, ejem, yo conozco una, dijo algo avergonzado Fran. Y la tengo un poco de miedo. Está mal educada.
- ¡Qué bueno! Hay que educar bien a los varones de los signos de las diversas masculinidades. Te doy un consejo. Sospecha de las personas que insisten mucho en la genética, la Naturaleza como argumento. Suele corresponder a una resistencia política o ideológica. Quien insiste en lo esencial en ese sentido, oculta un "determinismo biológico". Insinúan que no se puede cambiar o aprender. Dicen que una mujer no puede ser jefa o ir al futbol porque está en su Naturaleza el no hacerlo. Es como si el parir o ser madre le incapacitara para ello. Dicen que los hombres no cosen, ni se emocionan, o no van a hacerlo nunca por igual, o a querer hacerlo, porque el peso de su Naturaleza se lo impide.
Hace muchos años se decía que las mujeres no podían educarse porque se lo impedía su sexo, su naturaleza. Hace muchos años era un escándalo que un hombre tuviera un bebé en sus manos porque se le podía caer al suelo.
- ¡Eso es una tontería!, dijo mi amigo con toda seguridad.

Tener una altura concreta es natural. Lo que no es natural es la importancia que se le dé a eso. Lo que no podemos consentir es que en base a esa diversidad natural hagamos una jerarquía de poder, una diferente importancia social, etc

Hoy ve todo el mundo que es una tontería decir que un hombre no está preparado para cuidar a otras personas, por la naturaleza o esencia. Estoy seguro que todo, absolutamente todo lo que decimos hoy que queremos conseguir, dentro de doscientos años estará superado y parecerá una tontería. Nuestros tataranietos tendrán otros problemas.

- Por cierto Fran, ¿eres consciente que has relacionado a una paloma con la Paz?, ¿Eso es un símbolo, algo cultural, o es algo que está en sus cromosomas?, - le digo para así aprovechar el comentario que hizo antes.
-¡Cultural!, dijo Fran.

- ¡Bien! Una vez que miramos y medimos la realidad desagregando por sexos vemos la rica diversidad. Hay diversidad entre los mismos hombres. Hay diversidad entre las mismas mujeres. Hay diversidad entre hombres y mujeres. Cada persona es única. Algún rasgo lo vemos más frecuentemente en los hombres, y algunas cosas las vemos frecuentemente en las mujeres. Miramos y sonreímos.

3)El tercer dedo es el MOVIMIENTO- o el CAMBIO y la TENDENCIA. Todo lo dicho es "de momento".
La realidad no es una foto fija. Todo cambia. Todo puede cambiar. A veces parece que no. Cada hombre y cada mujer viven su vida, y cambian o no, mucho o poco, dependiendo de muchas cosas.
¿Estamos atentos y atentas a cómo cambian los datos del diagnóstico de la realidad?
-Hablamos de acceso y control, como dos herramientas para medir la Igualdad. ¿Lo habías oído hablar alguna vez, Fran?
-¡No!
En los ejemplos que hemos puesto hoy podríamos hablar de “el acceso de las mujeres al fútbol”. Tiene muchos puntos, acceso a la afición como elemento de ocio individual, o como elemento de actividad que se realiza en común con la pareja o el grupo, el acceso a ser jugadora, a ser árbitra, a ser "miembra" del equipo directivo, o propietaria del campo, ser periodista deportiva, etc Podemos hablar de acceso de los hombres a la costura o los cuidados.
-¿Entiendes?
-Si
-Y el control tiene que ver con el hecho de no bastar con la presencia, sino con tener poder para influir. No se trata de estar una mujer como un florero sino que también tiene que poder decidir sobre todo, el mando de la tele cuando hay fútbol, qué se hace en el tiempo libre, si se retransmiten los partidos de fútbol femenino, etc
El acceso de los hombres a las emociones, o a las tareas domésticas y los cuidados de niños y niñas aspira a un cierto poder para mejorarlo y personalizarlo. El control también es muy importante. En un futuro se hablará mucho de “los hombres en el control de sus propias emociones”, en los lazos afectivos familiares, en la elección del tipo de arroz que se consume, o cómo comunicarse con el o la pediatra.




4)Para el cuarto dedo nos hacemos una pregunta:  ¿En caso de empate quién gana, quién manda?

IGUALDAD ES IGUALDAD, nadie vale más, ni el hombre ni la mujer por el mero hecho de serlo.

¿Qué tiene más importancia tu diversidad o la mía? ¿Quién manda en casa? ¿Quién se impone cuando hay diversidad y discrepancia? ¿Realmente me creo que vales como yo?

Cuando hay tiempo y ganas es muy fácil responder a esta pregunta pero es terrible llegar muchas veces a las respuestas sinceras.

Muchos hombres quieren mantener los privilegios y pretenden que en caso de empate se haga lo que ellos dicen. Tú como yo, yo como tú. Es muy fácil desarmar las resistencias, los machismos, los prejuicios.




 
5)Y por último el quinto dedo: el TRATAMIENTO ¿A dónde queremos ir?

Sin corazas, con la sinceridad de la desnudez decimos...

¡Vale, cuenta conmigo! Es verdad, es muy fácil. Cuando haya cualquier cosa nos sentamos y lo hablamos. El objetivo donde queremos ir ya sabemos cuál es, y ahora trabajaremos y caminaremos en esa dirección.

-¿Lo has entendido ahora, Fran?
- Sí ¡Manuel, te voy a decir lo que he entendido! Yo creo que Igualdad es Igualdad. Cualquier hombre puede intentar hacer cualquier cosa e ir a cualquier sitio. Las mujeres también. Por eso somos iguales, ni más derechos ni menos. No es justo que haya privilegios a la hora de repartirse las cargas. 

Hay que limpiarse las legañas y mirar con las gafas de mirarlo todo bien, y aprender. Disfrutar con el camino. Saber y creer que valemos igual hombres y mujeres.

Al principio cuesta si hacemos caso a todo el mundo pero luego es muy fácil. Ahora ya sé que hay mucha gente que no cree en la Igualdad porque no se quieren "caer del burro". Y hay personas que se conforman con estar muy agarradas a una pata de ese burro.

-¡Colosal, amigo Fran!


-Cuando me vuelvan a preguntar me leeré la mano y me acordaré de los cincos dedos:
1) Mirar (diagnóstico).
2) Aprender (La Etiología  es cultural, la enfermedad es externa, está muy incrustada pero no somos "eso" por naturaleza,  "el machismo tiene cura").
3) Caminar (dco en movimiento con sus signos y síntomas)
4) Creer. Todas las personas equivalemos, tenemos la misma dignidad. ¿Realmente quiero mejorar? ¿Me lo creo o soy de los que ponen resistencias?
5) Trabajar por la igualdad (Tratamiento)

-¡Fran, choca esas cinco!
 

1 comentario:

  1. Yo si me quiero caer del burro, que buena herramienta la de los cinco dedos... Ha ponerla en practica... Gracias

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